Su Invitación

Fue una boda espectacular, la pasamos mi esposa y yo de pelicula, yo estaba ancioso todo el dia, por que sabia que esa noche habria de celebrarce una “noche de gloria” y pues despues de la ceremonia en la iglesia, nos fuimos a casa de una amiga, y pues llevamos ropa para cambiarnos y ponernos ropa mas comoda para continuar la celebración con un grupo mas pequeño de amigos; recuerdo que al irnos a cambiar con mi esposa, para entonces habia sido solo amiga, nos metimos en una habitación y pues yo me empiezo a quitar el tuxedo, la camisa y justo cuando me empezaba a quitar los pantalones, la pastora Mayra me dijo, hey! No, y yo le dije como que no? Y es que tenia pena ver la musculatura de mi cuerpo por primera vez, y me dice mejor salte y cambiemonos separados, y es que no le era comun desvestirse frente a ningun hombre y menos tan guapo; pero alfin nos cambiamos y nos fuimos a disfrutar.
Algun día les vamos a pasar el video de nuestra boda, ¿A cuantos les gustaría ver el video de la boda de sus pastores?
Hablando de las oportunidades, y de aporovechar nuestra oportunidad, les enseño de otra oportunidad, una invitación.
La Palabra nos habla de un hombre que preparó un banquete e invitó a mucha gente a disfrutarlo.  Al leer con atención, vemos que los invitados ya estaban en el lugar y el sirviente salió a decirles que pasaran adelante porque ya todo estaba listo. En ese momento, se excusaron para no entrar.
Lucas 14:16-17Entonces Jesús le dijo: Un hombre hizo una gran cena, y convidó a muchos. 17 Y a la hora de la cena envió a su siervo a decir a los convidados: Venid, que ya todo está preparado. 
¿De que tamaño era la cena? Habia de todo, de aquellas cenas que hay abundancia y sabor.
¿A cuantos invito o convido? A muchos, por lo tamto se cree que era un rey, invitando a cenar a su palacio.
Hace algunos meses se vivio por televisión desde Inglaterra una semana en la que se nos compartio todo lo relacionado a la boda del príncipe William con su prometida Kate. Era impresionante ver los preparativos. Se veian fotos de ellos dos por todos lados, las calles adornadas, y luego el dia de la boda, nos mostraron fotos de los invitados y se veia como llegaban vestidos y los gorros y el glamour con el que llegaban en las diferentes limosinas.
Pensé por un momento: ¿qué pasaría si me hubieran invitado? ¿como se sentiria usted de recibir una invitacion de parte de la reina Isabel de Inglaterra para que asista a la boda de su hijo el principe Williams, futuro rey de Inglaterra?
Yo me sentiria muy honrrado, no se usted, quiza a usted lo invitan tan seguido los reyes del mundo, que seria una invitación mas, no se, pero para mi seria un honor que un rey me invite a donde sea.
Luego pense con que le compro el regalo al principe, o bien que le regalo.
Hay invitaciones en la vida que son honorables, la gente se preparar para invitarnos, para atendernos, realmente lo hacen con amor y con cariño.
Este hombre habia preparado una gran cena con amor y dedicación para la gente y los invito para que llegaran, los invito por nombre y apellido para que estuvieran ahi.
Si esa invitación de la realeza terrenal es un honor, si la invitacion a la boda de el principe Williams es un honor, ¿cuánto más significa la invitación que nos hace nuestro Dios? Quien es rey de reyes y señor de señores, ¡La invitación del Señor es la más valiosa que puedes recibir en toda tu vida, no la rechaces!
Cuando Jesús nos invita a servirle, nos da la oportunidad de obtener galardones. No importa si eres empresario, obrero o estudiante, todos debemos aceptar la oportunidad de servirle. No obtendremos galardón en el cielo por nuestros éxitos empresariales, sino por la cantidad de personas que llevemos al conocimiento de Dios.
Lucas 14:18-20 Y todos a una comenzaron a excusarse. cuenta lo que dijeron los invitados al banquete. Ellos estaban conscientes de que rechazaban algo importante porque “rogaron que los excusaran”.  En el original,  la palabra “ruego” es la misma que se utiliza para “orar”. Recordemos que la oración es le medio para comunicarnos con Dios, agradecerle por Sus bendiciones y pedirle que nos libre de la tentación, no para excusarnos porque no queremos servirle.
Veamos que las tres razones que los convidados dieron son excusas tontas. El primero dijo que había comprado una finca y debía verla. Nadie compra algo sin verlo primero, además, era de noche, era ridículo decir que iba a inspeccionarla en medio de la oscuridad.  Imaginemos que iba con una lampara de aceite, ¿qué podría ver? ¡Nada que estuviera más allá de su nariz!  Es una excusa tan tonta como la que dio el segundo convidado al decir que había comprado unos bueyes que debía probar. ¡Seguro quería arar la tierra del otro ingenuo! Me suena como si fueran dos de los tres chiflados. Y el tercer chiflado es quien se excusó porque se había casado, cuando los recién casados buscan llegar tarde a su casa, felices porque ya no tienen que dar explicaciones a nadie por lo que hacen. No puedes poner excusas baratas para no servir a Dios que todo lo sabe. No uses la oración para decirle: “Dejo el grupo, dejo mi celula, dejo de servirte porque estoy cansado”. Usa la oración para decirle: “Gracias por la invitación que  me das para servirte,  renueve mis fuerzas para hacerlo bien y perseverar”.
Me puse a analizar un poco mas en dettale las escuzas de los invitados y llegue a esta conclución:

1. Para empezar para comprar una hacienda o cinco yuntas de bueyes se requiere dinero.
2. Para tener dinero se requiere inteligencia.
3. ningun inteligente compra una hacienda sin antes verla.
4. Ningun inteligente compra yuntas de bueyes, o maquinaria, o un tractor, o una herramienta para su empresa, negocio o fabrica, sin antes probarla.

Por lo tanto, saque esta deducción y espero te ayude a aprovechar tu oportunidad y aceptar Su invitación:

1. Ningun inteligente debe presentar escusas bobas o infantiles.
2. Muchos menos debe, si es inteligente, presentarle dichas escusas bobas a alguine que es mas inteligente que el.

Usted como trabajador no puede presentar escusas bobas, al dueño del lugar o compañia donde usted trabaja, porque el no es dueño por tonto, el ya se las sabe de todas, todas.
Usted como discipulo de Casa de Dios no puede presentar escusas bobas, a su Pastor, porque el no es el Pastor por tonto, el ya se las sabe todas.
Que las aceptemos, no quiere decir que realmente las apovemos.
¿Quién compra una hacienda sin antes verla? Y decide ir a verla de noche, a la hora de la cena, cuando alguien mas estaba por pagarle la cena.
Cuando no habia luz electrica, esto paso hace mas de dos mil años, cuando Jesús lo conto, de hecho la gran mayoria de la fincas, ranchos el dia de hoy no tienen alumbrado electrico en todo sitio, no estan totalmente iluminada, osea que ni hoy dia seria valiada la escusa.
Usted se imagina a este tipo, viendo la finca de noche, diciendo: ¡Hay que buena finca compre! Ala que grande esta, mira hasta donde llega, cuando usted menos lo piense, el hombre estara dieciendo que buena finca compreeeeeeeee! Se fue en el hoyo.
Entonces es una tontera comprar una finca sin verla, y es una tontera mas grande ir a verla de noche y con hambre, sincenar, despues de haberla comprado, pero la tontera mas gande es presentar la escusa ante el hombre mas inteligente del mundo, nuestro Señor.
El otro compro cinco yuntas de bueyes y dijo voy a probarlas, ¿Quien prueba los bueyes de noche? A no ser que este haya querido probar las cinco yuntas de bueyes en la finca de su amigo el becino que acababa de comprar la finca sin verla y entonces cuando llego a la hacienda, le dijo prestame tu quinque, quiero ver como trabajan los bueyes, osea que habia cinco yuntas de bueyes y otros dos, el que compro la finca y el que compro los bueyes. Esa se me chispotio!
Y el tercero dijo me acabo de casar no puedo ir, señores si algo quiere hacer el recien casado es llegar trade por fin a donde sea, de novios siempre hay que estar pidiendo permiso, hasta que hora, las nueve de la noche, las diez, las once, en fin siempre hay que estar pidiendo permiso.
El dia que te casas piensas que por fin podras llegar cuando quieras, pero lo que no sabes que que despues de una semana relizas que siempre hay alguien a quien hay que pedirle permiso, y se caso con ella.
Yo no le pido permiso a mi mujer, solo le pregunto que opina de la hora a la que debo de regrezar.
No es que las mujeres no manden, solo nos administran.
Y la verdad es que muchos de nosotros le estamos presentando a Dios escusas y renuncias. Me escuso a no atender tu invitación a servirte, pero es que tengo mucho trabajo. No puedo llegar el Domingo a la iglesia porque estoy muy cansado, como nos atrevemos a presentarle a Dios lo que Dios nunca quiere oir, escusas.
Estoy cansado, voy a cerrar mi celula, no si uno esta cansado descanza y sigue adelante. Peque, pues no se deja, se levanta, pide ayuda, se arrepiente, se restaura y continua.
Usted puede ponerle Pausa al servicio, pero jamas  Stop. Nunca, porque el llamado que Dios nos ha hecho es un llamado honorable y unico.
Cuanta gente hoy se queja de lo que antes desiaba ver o tener. Deciaba ser bendecido por Dios con trabajo y hoy te quejas del trabajo, para que lo pediste, es que es muhco, me hibieras dicho cuanto entonces.
Que es esa oración, ya no aguanto la vida, si la vida es una bendición de Dios.
Preguntele a cuantos han sido asecinados, o han muerto de alguna enfermedad, si no desearan estar vivos y usted por medio de las escusas se quiere safar del privilegio de servir a Dios.
Aquella cena era una bendición, aquella invitacion era honrable, no era para decirle, tengo que ir a ver una finca a la hora de la cena, no era para decirle he comprado cinco yuntas de bueyes y las voy a ir a probar a esta hora, aun cuando hubiera sido hora del desayuno o comida, uno deja las yuntas de bueyes, uno deja las fincas y atiende esa invitación.
Dios nos ha hecho algunas invitaciones, dichas invitaciones son oportunidades, aprovehca cada una de ellas, quiza no se repitan, velas como un privilegio y aprovecha tu oportunidad.
Nunca he visto a Jesús rogarle a nadie para que le sirva o detener a alguien que renuncia hacerlo. El estaria bajando el honor que Su reino tiene.
Si te has alejado porque pecaste, Dios te da la oportunidad de restaurarte y tomar de nuevo tu lugar.  Si estás cansado, acércate más a Él y pídele nuevas fuerzas, seguro te las dará. Nunca te rindas y le abandones.
Acepta Su invitación, permítele entrar en tu corazón y darte vida eterna. Verás que nunca te arrepentirás de hacerlo porque servirle y disfrutar de Su banquete es un gran honor.

¡Acepta Su Invitación!

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